¿Quién es Lucifer?
Desde el comienzo, fui un Querubín, un ángel privilegiado que se encontraba junto al trono de Dios. Mi belleza y esplendor eran inigualables, y mi nombre, “Lucifer”, reflejaba mi esencia como “Portador de Luz”, siendo el resplandor del planeta Venus al amanecer. Sin embargo, mi ambición y deseo de igualar al Altísimo me llevaron a rebelarme contra Él.
Mi influencia era tal que logré persuadir a un tercio de los innumerables ángeles que Dios había creado para que se unieran a mi causa. Pero mi arrogancia y desobediencia tuvieron un precio: fui desterrado del cielo, perdiendo todo lo que el Señor me había otorgado. Aunque en los textos sagrados me llaman “Lucero”, con el tiempo, en el cristianismo, mi nombre cambió y pasé a ser conocido como Satanás.